Como limpiar un pollo para cocinarlo entero

 

Comprar un pollo entero para luego limpiarlo en casa es muy fácil de realizar y sale mucho mas barato que comprar uno cocinado.

Lo primero es elegir un pollo de calidad, existen diferentes tipos de pollos: blancos, amarillos, camperos, ecológicos, … 

La carne de pollo es  muy consumida por su fácil digestión. Además de que un pequeño filete de pollo nos aporta el 30% de las proteínas que nuestro cuerpo necesita diariamente. 

Es una carne muy rica en vitamina B, que son esenciales para el sistema nervioso.

Su aporte en grasa es mínimo, siendo una de las carnes con menos grasas.

Y nos ayuda a mantener los huesos y dientes fuertes por su aporte de minerales como el fósforo. El potasio, que ayuda a músculos y nervios. Y el hierro tan necesario para la formación de glóbulos rojos.

Teniendo ya nuestro pollo en casa, lo primero que hay que hacer es con ayuda del cuchillo arrancar las plumas que puedan quedar, se debe sujetar la pluma entre el cuchillo y el dedo y tirar.

Pueden quedar algunas pequeñas o pequeños bellos que no se puede arrancar con el cuchillo, para ello con ayuda de un soplete o acercando el pollo al fuego se deben quemar.

Retirar la cabeza, cortando por la unión de dos huesos del cuello y descartar

Introducir el cuchillo por a piel que rodea al cuello y tírala, conservando el cuello.

Con ayuda de un cuchillo cortar la parte del ano rodeándolo, quedando la forma de un rombo.

Con cuidado retira las vísceras y tira los intestinos.

Sin romper la bolsa biliar, porque podría amargar la carne del pollo, sacarla y descartar. Esta bolsita es de color verde oscuro.

Conservar el corazón, hígado y mollejas.

Quitar el exceso de grasa que tenga en su interior y tirar.

Descartar también la grasa del exterior de la molleja. Cuando este limpia de grasa, cortar longitudinalmente y retirar los granos de semillas y pienso no digeridos del interior. A continuación dar la vuelta y enjuagar con agua. Por uno de los extremos empezar a levantar la piel amarilla que tiene, se despegará como una pegatina. Y reservar la molleja limpia.

Los hígados, corazón y cuello están muy ricos en guisos y las mollejas enharinadas y fritas están muy sabrosas.

Cortar la punta trasera de las patas por la unión de los dos huesos y descartar.

Ya estaría listo para empezar a condimentarlo y/o rellenarlo para comerlo entero.

Un consejo sería poner un poco de papel de aluminio en el extremo de sus patas para evitar que se quemen.

Espero que os sirva.